La autodisciplina positiva es una magnífica forma de lograr mejorar la atención de los niños, desde un estado de calma a un punto de máxima conexión y concentración. Fomenta actividades en familia como salir a caminar juntos, jugar en casa, utilizar juegos de construcción, etc. Y respeta los procesos de tu hijo, permitiéndole espacios para que desarrolle su etapa infantil.
Recuerda que es un pequeño, y que debe aprender reglas, normas, comportamientos, que se equivocará en ocasiones, así que corrígelo con amor, ¡Si tu no lo sabes todo, imagínate tu bebé!
Eso sí, debes ser una figura firme, no manipulable, pero ten en cuenta que las correcciones deben ser inmediatas y proporcionales a la falta.
No trates a tu pequeño como un adulto, pero tampoco dejes que haga lo que quiera. Pon límites. De hecho, el siempre estará buscando hasta que límite llegas, así que no dejes que te falte al respeto. Corregir a tiempo, con educación y respeto es muy importante.
Una educación respetuosa, amorosa, adecuada, hará que tu hijo crezca como un ser de bien, armonioso y con inteligencia emocional.
Brinda siempre un abrazo, un respaldo, una palabra de aliento y tu hijo aprenderá a actuar desde la calma. Permítele la oportunidad de participar en algunas decisiones, y de aconsejarte de vez en cuando, los niños tienen una percepción diferente del mundo, también cierta sabiduría que merece ser escuchada.
Oye a tu bebé, apóyalo y corrígelo, para que tu hijo actúe desde la calma, ¡verás resultados rápidamente!
Deja un comentario